Gladys Brites de Vila / Ligia Almoño de Jenichen
La vergüenza se relaciona con el miedo a mostrarnos tal como somos, por la creencia de que así, con nuestras equivocaciones e imperfecciones, no seríamos aceptados. Carecemos de la confianza básica de ser dignos de ser amados tal cual somos.Si bien la vergüenza y el enojo son formas opuestas de reacción cuando nos sentimos frustrados, tienen la misma raíz. Ambas son manifestaciones de heridas recibidas que inciden en la identidad y en el desarrollo de la autoestima.En este texto nos vamos a abocar a lavergüenza disfuncional, relacionada con los sentimientos de inferioridad y baja autoestima. Nuestra propuesta, a través de una modalidad teórico-práctica, es sanar el autoconcepto de indignidad y pasar de la autocrítica a la autocompasión para adquirir una sana autoestima.La buena noticia es que podemos entrenarnos para desarrollar estados mentales positivos y desactivar los negativos. A este fin, y para comprender mejor la estrecha relación que existe entre el cuerpo, la mente y el espíritu, antes de abocarnos a desarrollar el tema de la vergüenza vamos a hacer una descripción de la neurofisiología de las emociones y de los sistemas cerebrales que las regulan. 10