El Nuevo Testamento es un libro radical. Su personaje centralno tenía nada que ver con la religión como era costumbre. Élhizo declaraciones escandalosas, pidió cambios extensos, y creóun disturbio casi en cada lugar al que fue. Pero la naturalezaradical de su mensaje no radica en llamados a protestar o enabogar por el valor de la violencia.Por el contrario, radica en su llamado a dar la bienvenida alreino de Dios, el cual está irrumpiendo en la era actual con unllamado a llevar el amor a Dios y el amor y la responsabilidad deunos por otros, junto con la idea de una comunidad, a una profundidaddramáticamente nueva.